“ENTREVISTA A ORNELLA”
- Ruth Ross
- 30 jun 2019
- 9 Min. de lectura
(Ciudadana del mundo, paciente de Córdoba, Mina Clavero y Buenos Aires y a distancia en Guatemala)
R- ¿Cuándo me conociste, vos te acordás?
O-Te conocí en Kumaris, fue en el 2000…
R-Yo recuerdo que vos estabas estudiando
O-Si por eso yo creo que estaba en tercer año de la facultad
R-¿En qué año?
O- Fue en el 2011, 2010 o 2012, entre esos años.
R- Si por esos años fue, yo también estoy con esos años, por ahí fue. No me acuerdo si fue en el 2011 o en el 2012. Creo que en el 2012 pero no estoy segura.
O- La primera sesión con vos, lo que sí recuerdo es que fue a la mañana bien temprano. Yo estaba con el pulóver verde que amo y me recuerdo que te vi, vi tus ojos… Yo te vi unos ojos, unos faroles gigantes y yo entre así toda como… hay… y que me enteré que fui la primera persona que atendiste ahí en Kumaris y cuando Cris me deja así de atrás, que se va, te veo a vos y yo quedé como… Yo te vi toda llena de luz, llena de magia y yo me sentía un pollito mojado, así como… sin saber a qué iba, ni nada, así. No tenía idea pues a qué iba pero yo tenía la certeza de que tenía que estar ahí.
R- Y que magia se creó, que lazo de amor se creó a partir de ese momento entre las dos ¿no? Este… porque realmente creo que más allá de lo terapéutico y de todo eso se creó un vínculo de amor muy grande entre las dos.
O- En ese momento, como te contaba antes, volví a sentir esto de primero “reconocer”, como sentir que ya te conocía y esa sensación de “volver”, de “volver a casa” y mira, lo que sentí en ese momento fue como la re-conexión y el reencuentro con la tribu por así decirlo. Así lo viví en ese momento, fue como “soy parte de tu tribu”, o algo así.
R- Si, lo que pasa es que en ese momento hubo eso, un reconocimiento de almas, este… y sí tiene que ver con una re-conexión de la tribu, con un sentido de pertenencia. ¿Y qué sentís que te aportaron mis sesiones?
O- Bueno, tus sesiones fueron para mi un antes y un después. Fue, además de la luz y todo el amor fue traer consciencia a mi proceso y justamente, traer consciencia desde el amor, desde la luz. Me permitió transitar y vivir y dar los pasos desde otro lugar, expandirme poder entender desde lo intelectual y desde mi corazón, desde el ser, poder sentir desde ahí, desde donde venía el cambio, desde donde venía yo y hacia donde iba, es como… me diste información de… sentí que con las sesiones fui descubriéndome, fui descubriendo quien soy, de a poco, por fragmentos y eso me trajo seguridad, me trajo firmeza, poder plantarme, poder encaminarme, caminar de otra forma y en ese conocerme a mi también conocer al resto y a mi entorno desde otro lugar, a la familia en la que nací, a los seres de los cuales estaba rodeada en todos mis ámbitos, las elecciones que venía haciendo y el mundo, entender de que somos parte de algo mucho más grande, de sentirme en la Tierra, de tomar consciencia de todo mi cuerpo de luz. O sea que fueron, además de empezar a trabajar con toda la parte emocional, después vinieron todos los grandes flashes digamos, viví cosas muy hermosas y particularmente, además de las sesiones fue todo el camino que hice con vos. También con las iniciaciones que pude tener el honor de recibirlas de vos, y una de las que más vive en mí es la de Munay Ki, que después de hacerla con vos hubo un gran cambio en toda mi vida en la percepción de afuera, en mi cuerpo, en mi cuerpo de luz y después… de hecho, me recuerdo que después de la primera, del primer día del Munay Ki, la primera noche, fue cuando tuve uno de mis primeros viajes astrales consciente y que al día siguiente fui a contarte a vos y a Cris como: “me pasó esto anoche”… ustedes se miraron, y vos me dijiste:- que evidentemente eso era lo que había venido a hacer y vos me explicaste lo que me había pasado. Fue un flash muy intenso… lo viví toda la noche y recuerdo que al día siguiente yo llegué más cansada que el día anterior…
Y siempre la guía ¿no? Siempre estuviste muy presente, siempre muy atenta en el acompañamiento del camino eso es super hermoso, muy sanador.
R- Gracias. Y también recuerdo, bueno… después te fuiste a Guatemala y después viniste a Mina Clavero y en Mina Clavero te hice la Sanación del Árbol, que también fue un flash.
O- Antes de irme, recuerdo que recibimos una sesión en el portal que había atrás de tu casa…
R- Si.
O- Donde se hizo muy intensa y ahí me diste las pautas y llegaron los mensajes de todo lo que iba a ocurrir al comienzo del viaje y los cuidados que debía tener, y fue así, tal cual. Y en ese momento yo también tomé como… los miedos que tenía por la incertidumbre del movimiento y demás, en esa sesión me quedó muy claro que era por ahí el camino, entonces sí recuerdo esa sesión en particular. Y recuerdo de estar ahí y estar horas, pero ni nos dábamos cuenta de que pasaba el tiempo, para mí eran dos minutos pero no… habían sido cuatro horas, ponele.
R- Si, recuerdo.
O- Después me fui, después volví y volvimos a hacer otro trabajo allí. También ahí me contaste que hubo como dos herramientas, o dos formas nuevas que tuviste de atender y en las que había sido yo también la primera que había llegado ahí.
R- Si, eso fue antes de irte, con ese portal, que estaba en Mina, que no está acá, pero, allí fuiste la primera también allí, como también fuiste la primera persona a la que atendí a distancia. Cuando estabas en Guatemala. Bueno, en realidad, atendí a distancia estando en Mina Clavero a gente de Buenos Aires, y atendí a distancia estando en Mina a gente de Israel, pero… conscientemente y buscándolo, buscando esto de atender a distancia, fuiste la primera persona. Y yo recuerdo esto de la Sanación del Árbol, que estábamos en la entrada, en el terreno de entrada de mi casa, sentadas y que fue muy flashero, que te dio vuelta la cabeza.
O- Y que ahí se presentó también el ser de mi bisabuela paterna, que yo nací el mismo día que ella había nacido también y fueron muy locos los mensajes que dio, que se presentó en ese momento y… Si, me recuerdo que me quedé ahí… ffffffffffffffffffff…. Fue muy linda. Han sido sanaciones, flasheras pero hermosas y llenas de mensajes y amor y eso, son procesos… los procesos que viví con las sesiones fueron para tocar temas super delicados, fue poder abrazar la sombra, ver la sombra de una y poder abrazarla con amor, llegar a eso, bueno fue gracias a esa compañía, a ese acompañamiento.
R- Algo de eso pasó cuando estabas en Guatemala y estabas decidiendo, sintiendo que tenía que haber un cambio y te rompiste los brazos, y algo de eso pasó que terminó trayéndote para Argentina, ¿o estoy equivocada?
O- No. Eso fue así. Y bueno, en ese momento, después de tanto tiempo de no habernos hablado o de estar en contacto, en mi momento de mayor confusión, cuando ya había tenido mensajes y demás, lo que primero pensé fue en escribirte y me llamaste al toque, me llamaste al instante en el que te conté como estaba y bueno me encontraste en el estado en que me encontraste.
R- Si… no. No te encontré. Vi tu cara, pero no te encontré. Después sí, ya apareciste. A mitad de la sesión ya empezaste a aparecer. Al principio no te había visto. Después apareció porque como yo digo sos un duende, un duende feliz, una campanita y esa campanita feliz en ese momento no estaba pero por suerte volvió en seguida. Con brazos rotos y todo la campanita volvió. Y ahora estás atrás de tu búsqueda personal, acá en CABA, Buenos Aires, así que bien. Estás encontrando un nuevo lugar en el mundo.
O- La campanita anda revoloteando por Buenos Aires.
R- Así que nada, yo, sinceramente, yo tengo que decirte GRACIAS, por haberme dejado entrar a tu mundo, por haberme dejado compartir tantas cosas hermosas con vos, por estar ayudándome en este momento, por ser un ser tan hermoso Orne, tan hermoso. Te amo, lo sabés.
O- Si, y yo también te amo.
O- Otra de las cosas que fue sumamente importante para mi, es la espontaneidad con la que trabajas y con la que te comunicás y con la que llegás a entrar en las personas, en los corazones de las personas y eso, siempre, espontánea y auténtica, con ese equilibrio perfecto entre tu ser de luz y tu parte terrenal, así, siempre sonriendo o haciendo chistes. Por ejemplo, me recuerdo… no me acuerdo si fue en Kumaris, cuando estábamos haciendo el taller de meditación de Merkaba o en las iniciaciones de Munay Ki, cuando terminamos nos pusimos a conversar y vos estabas contando una experiencia tuya con un señor en una radio, donde hubo una transformación de tu cara, y de repente dijiste:- pero, este pelotudo… Y Cris te dijo:- Por Dios Ruth, por favor- Y vos te reías…
No, no. Yo te juro que en ese momento que recién te conocía pensaba por dentro LA AMO, la amo con todo mi corazón. Todos se partieron de la risa y vos así con una naturalidad la miraste a Cris y le dijiste: - y si, si es un pelotudo- ¡Fue genial!!! Te juro que lo tengo super, pero super grabado.
Y es eso, acompañar siempre con la risa.
Me hiciste sacar, emerger desde muy profundo a mi niña interna. Con las sesiones con vos fue lo que más trabajé. Y fue increíble reencontrarme con ella, volver a jugar con ella. De hecho también me recuerdo en el rito de las bandas de poder del Munay Ki, que yo no podía parar de reírme, lo único que hacía era reírme, eran carcajadas y carcajadas, y vos me dijiste:- es tu niña, déjala salir.
Y en todas las sesiones que trabajamos juntas siempre hubo mucho hincapié en esa parte, en dejar salir a mi niña interna y fue a partir de ahí, yo empecé a conectar con mi niña después de los trabajos con vos.
R- Lo que pasa es que, si hay algo que yo recuerdo es que cuando te conocí, si bien siempre tuviste la magia y el ángel que tenes, estabas muy reprimida, estabas muy contenida, muy de tener que hacer una facultad, muy de seguir los mandatos familiares, sin permitirte ser, para no lastimar a nadie o para que los demás no se ofendan, hasta que te diste cuenta de como era la vida y de como eran las cosas y decidiste convertirte, como digo yo, en una ciudadana del mundo y empezaste a irte, a viajar, primero a Guatemala y después a los distintos países en los que estuviste viviendo tu propia experiencia y dándote cuenta de quien sos en realidad y eso me parece hermoso porque esa semillita de luz tiene que estar sembrada en donde se necesita la luz y bueno, yo creo que viviste una experiencia alucinante Orne, y en el momento justo. Y ahora en el momento justo, donde tu energía es necesaria en Buenos Aires, en un lugar tan convulsionado del mundo en este momento, estás acá, causalmente.
Nadie sabe por cuanto tiempo vas a estar. Nadie sabe nada de la vida más que el aquí y el ahora, pero que en el aquí y el ahora te estás encontrando en este lugar que es donde hoy tenes
que estar.
O- Exacto. Gracias.
R- No. Gracias a vos, gracias al Universo por habernos juntado, por hacer que la magia que encontramos aquel día que nos conocimos, esa mañana cuando viniste a atenderte, siguiera a través del tiempo y siguiera y siguiera, por ejemplo, también, hace tres meses estuvimos dando talleres en Mina Clavero y viniste, siguiera a la distancia… Nos vemos en donde sea, tanto como paciente o como amigas, porque ya las cosas también cambiaron y has venido a vernos aunque sea por un ratito a nuestra casa. Yo agradezco al Universo haberte puesto en mi camino, realmente que sí.
O- Gracias, Ruth, yo estoy agradecida de todo lo que vivimos. De hecho eso. En los momentos en los que más dude o donde hubo mucha oscuridad, fueron en los momentos en donde con tu trabajo y con tu luz pude seguir e hizo que abrazara a la sombra, no que la negara, ni la rechazara, ni la escondiera bajo ningún lado, que la abrazara y trascendiera y la transformara para poder salir.
R- Y si, para poder encontrar la salida, y si. Por eso ese día que hicimos la atención a distancia, ese día en que vos estabas tan mal, pudiste reconciliarte con tu ser y volvió la campanita. Si, si tal cual. Y estamos en un momento energético muy duro para cada uno a nivel personal, como para la humanidad en general y el Planeta ¿no?, entonces quizás las cosas que soñamos o las cosas que esperamos o no sean, o se dilatan o sean diferentes a como creemos que tienen que ser, pero bueno, con las palabritas que te dí para estos tiempos: INCERTIDUMBRE, IMPREVISIBLE, FLEXIBILIDAD, PACIENCIA, FLUIDEZ, ACEPTACIÓN, COHERENCIA, SOLTAR, DECANTAR viviendo la vida desde ese lugar, sabemos que todo puede pasar y tenemos que fluir.
O- Exactamente, Ruth, gracias.
R- No, gracias a vos.

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