top of page
NOTAS DE LUZ: Blog2

Terminando con un círculo de dolor

  • Ruth Ross
  • 2 jul 2019
  • 4 Min. de lectura

Por Ruth Ross


Afuera los pájaros trinaban por doquier. La música de los grillos entonaba una hermosa melodía. El sol iluminaba las montañas intensificando o atenuando los colores, mostrándolas por momentos de tonalidades rosadas, en otros instantes violáceos y luego azuladas. Este parecía ser un día espectacular, y lo sería para todo el que lo estuviera disfrutando, para todo el que se fundiera en unidad con la gran majestuosidad cósmica. Para todos, excepto para alguien, Oscar.

Él desde chico se había sentido como fuera de foco dentro de este planeta. Siempre sintió que no encajaba dentro de los engranajes de la estructura que querían imponerle aquellos que decían ser los adultos. Creció lleno de enojo, resentimiento y de tristeza.  Fue perdiendo amigos.  Tuvo varias novias, pero ninguna se quedó junto a él, debido a sus grandes inseguridades y a su tan baja autoestima.

En la escuela solo había sido uno del montón, nunca se destacó en nada.  En sus empleos siempre parecía el hazmerreír de sus compañeros.

Su congoja había ido en aumento día a día, y esto lo había llevado a tomar una honda y profunda decisión, la de terminar con su vida.  Puso una fecha en el almanaque, que causalmente era ese día tan esplendoroso, en el que dispuso sobre la mesa de su pequeña cocina unas pastillas que había comprado el día anterior. Echó una breve mirada al paisaje y al entorno, y, cuando se aprestaba a terminar con todo, cerró los ojos y comenzó a ver una tras otra la proyección de distintas imágenes. Supo que se estaba viendo a sí mismo en vidas anteriores, pudo verse como hombre, como mujer, como joven, se vió en diferentes lugares, países y situaciones, pero en todas veía un final común... en todas terminaba sintiéndose infeliz y ¡suicidándose! ¿Que era aquello que estaba viendo, sería solo una casualidad? ¿Su mente le estaría jugando una mala pasada?

“No Oscarcito”- dijo una dulce voz - “Las casualidades no existen”. “Estoy aquí tratando de mostrarte cual ha sido tu karma, tu aprendizaje en las últimas vidas que has vivido.  Estoy tratando de que no termines del mismo modo.  Estoy queriendo ayudarte a revertir un karma que vienes repitiendo una y otra vez, y el cual te seguirá acompañando en cada una de tus vidas próximas hasta que puedas por fin sanarlo.  El suicidio, amado Oscarcito, trae para los suicidas la búsqueda de terminar con todos sus infortunios para entrar en un mundo de paz.  El tema es que dentro de la escuela evolutiva, el suicida tiene que volver y volver, y volver a encarnar pasando por las mismas pruebas hasta que por fin logre revertir su proceso”. “Debes detenerte Oscar”.- siguió diciendo la voz - Debes entender que eres y has sido el responsable de cada cosa vivida, debes hacerte cargo y entender que mereces vivir tu vida desde otro lugar, desde el costado del amor. Del amor verdadero, del amor incondicional, del amor puro. En principio y por sobre todo hacia ti mismo y hacia la Fuente creadora de todo, y luego hacia los demás. Debes perdonarte Oscar, perdónate sinceramente en esta y en todas tus vidas anteriores, pide perdón a la Luz y también a aquellos a quienes en algún momento hallas lastimado, y perdona y libera a aquellos que te han causado tanto dolor, sintiendo que en la vida todos actúan como maestros, siendo buenos o malos, tal sea la lección que los humanos deban aprender.  Cambia Oscarcito, estás aún a tiempo.  Reacciona!!! Libérate de tus presiones y de tus miedos. Da un giro hacia la luz que te dará la paz y la libertad que tu tan oprimido corazón anhela. Recibe esta asistencia que la hermandad cósmica ha venido a darte, para ayudarte a recordar, para que puedas continuar con tu camino”. “He de decirte una última cosa: tu puedes ser la persona que siempre has soñado, tu puedes encontrar la felicidad; el que tu futuro cambie o no, siempre depende de cómo vivas el momento presente. Si continúas con tus planes, obviamente obtendrás la ansiada partida de este mundo, pero encarnarás en la próxima rueda evolutiva con el mismo mandato en el que ahora te ves inmerso. Si por el contrario, arrojas las pastillas a la basura, tendrás una nueva y real oportunidad de “ser” y de encontrarte con todo lo que hasta ahora no habías conocido, de la mano de la Felicidad”. Tú elijes. Tu futuro depende de ti, pero no el de Oscarcito, sino el de todas tus vidas futuras”. “Y antes de irme, te dejaré con una nueva posibilidad de luz: Tu eres Oscar, la resurrección y la vida de todo el bien en tu corriente vida, tú eres Dios en acción”. Todo depende de ti....

Cuando abrió los ojos casi anochecía. Los grillos aún cantaban con intensidad, la luna brillaba por sobre las montañas y la paz era en el entorno. Con los ojos llorosos tomó en sus manos las pastillas, dio unos pasos para arrojarlos en la basura. Miró al cielo y solo grito un ¡gracias!, hoy sé que tengo la oportunidad de cambiar y mejorar mis ciclos de vida y evolución. Hoy sé que yo podré desde este instante vivir en un mundo mejor para mí. Hoy sé que lo lograré!





Comments


bottom of page